CON TU HERMOSURA

CON TU HERMOSURA:

Me contagia la magia que genera tu sonrisa, creo que tu mirada es más engañosa que un truco de magia, tus piernas, ¡tus piernas! Se amarran en mi cintura como tal cinturón, sueño con tomarte con mis deseos, en mi mente te clono tantas veces como sea posible y te lleno con todas mis fantasías, no eres la única en la lista de mis deseos, pero eres tan lista para que yo piense que soy el único en tu cama, no me interesa más que tocarte, gozarte, cuantas veces te me antojaras me pregunto, que podemos perder te digo viéndote a los ojos, tu ropa ajustada a tu piel me fascina, el calor que generas al sudar es sofocantemente excitante, que piensas ahorita te pregunto, que sientes ahorita ¡te digo! tu ombligo tocas hasta llegar a tus labios  y me indican que es ya el momento, te excita verme así me preguntas, con una mirada soñada, cruzas la pierna y pienso lo que todo hombre desearía hacerte, puedo rozarte de poco a poco antes de comerte con mis fuerzas, quiero decirte que me dejas sin respirar, en mi mente digo, como me controlo, porque el solo echo de olerte hace palpitar a mil por hora mis deseos, que buen uso le damos al deseo ¡amor! Me dices con voz de pasión, se te antoja poniéndote de espaldas, una mujer sabe como cazar y terminar una presa como yo, hoy quiero jugar con la comida me dijiste con una sonrisa picara lamiéndote los labios, que hace un hombre en una situación así, cuando se nos va de las manos ¡que hace! La ropa que usas no deja de excitarme dije, hago que me prestes tu atención, bajándome el boxer frente a ti, atrape su mirada me dije, me lo veo y le digo es exacto para ti, es exacto para tus deseos, mi mente me dice, la tienes hipnotizada, es hora ya, ¡atácala! Pero ella es astuta, toma mis manos que encajan como una pieza exacta en un rompecabezas justo en sus pechos, no puedo escapar me dije, pero tampoco ella trata con un cachorro, me agacho y con mi boca suavemente me deleito de ella, se excita más o igual que yo, me sonrío y la atrapo con mi mirada que mata, le digo solo a ti  quiero tocar, me mete de un jalón a su cama, tócame el tiempo que se te antoje me dice, ¡gane! Me dije casare a mi presa, pero no es tan fácil ¡creo! Se pone sobre mi, y me hace caer desde el cielo aquel; el calor y sus gemidos son asombrosos, la siento, la penetro, sus ruidos de placer me paralizan, que hago, que hago, me digo, cierro los ojos y me fascino del éxtasis que me da una desconocida de mi corazón, soñé con eso, no lo se, solo me atrapo y me mato, esculpí su cuerpo y lo guarde en mi mente para cuando se me antoje, y aunque termine siendo la presa en un acto que e denominado como mi gran excitante perdida ante la hermosura de un cuerpo y las artimañas de aquella presa.

PENSAMIENTO:

¡Te soñé primero, te enamore y te hice mía sin que tu lo supieras!

-Paulo Roldan.