UNA HOJITA MORDIDA:
Después de caminar por horas, empecé a sentir miedo,
vi el sol empezarse a ocultar tras un par de montañas, el camino era
interminable y definitivamente me dije estoy perdido, bueno no me queda más que
acurrucarme en aquel viejo árbol mientras la anochecida oscuridad me hacia
suyo, dormí luego de llorar por un par de horas, lo único que me acompañaba era
un pequeño hormiguero cerca de mi, y una fila de hormiguitas que lo rodeaba, cerré
mis ojos pidiendo ayuda a mi Dios, y dormí…. Silencio absoluto, ni siquiera el
sonido de un grillo, y escuche una voz que me susurraba algo al oído, ¡que
tienes! Escuchaba a lo lejos, yo honestamente esta aterrado porque no sabia si
eran alucinaciones mías ya que llevaba un día sin comer y con un poquito de
agua en mi cantimplora, escuche nuevamente ¡no tengas miedo! Todo va a estar
bien; cual es tu miedo ¡dime!, me dijo aquella dulce voz, de ¿donde vendrá? Me
pregunte, pero bueno, tome valor y dije, ¡hola! Y nadie contesto, seguramente
estoy volviéndome loco me repetí insistentemente, y escuche nuevamente esa voz
¡no! Loco no creo, ¿quién es? Dije, a ¿que le temes? Me dijo nuevamente; resignándome
dije a todo ¡esto! Al que me perdí, a la oscuridad del camino, a la impotencia
que tengo de no poder hacer nada, a lo tonto que soy por perderme, a que pensé
que podía caminar por allí y llegar al final, ¡no se! Creo que aquí moriré,
aquí dejara de existir mi vida..
Paso un par de minutos y no tenia respuesta alguna
de aquella misteriosa voz, y de repente, un ¡ya terminaste! Solo dije eso creo,
la voz afino su garganta con un “buen trago de saliva” le temes a todo, todo lo que ves son
problemas, le temes a lo desconocido, le temes a lo que no crees, le temes a lo
que no ves, le temes a todo por ignorante, pero no te tomas el tiempo de
pensar, analizar, y entenderte, que mal, porque sabes que algo es malo y sin
pensar lo terminas haciendo y luego lloras sin control como diciendo, por que
lo hice, que risa me dan esas personas, yo en cambio tengo un método fácil de entenderme
y de aceptar las cosas, de que a pesar que en mi mundo todo es pequeño, y veo
todo lo que me rodea como gigantes obstáculos, siempre me las ingenio para
sentirme contento y sentir paz conmigo mismo, aunque así este en situaciones
difíciles, siempre tengo un “az” bajo la manga; entiendo le dije, pero seguramente
tu o lo que seas has vivido mucho y pues tienes una experiencia vasta en la
vida, ¡ja ja ja ja! Echo la carcajada aquella voz, yo soy una hormiga mi nombre
es “solenopsis” y no tengo tanta experiencia así como tu crees, ¡haa! Una
hormiga, realmente estoy mal me dije, si aunque no me lo creas si, soy una
simple hormiga y te quiero ayudar, ¡pero! Como una hormiga me puede ayudar,
Dios mío que gran ayuda me enviaste, dije, en tono sarcástico, aquella voz
¡suspiro! Yo escuche claramente ese suspiro y me dije, bueno igual voy a morir
aquí, si no me muero de frío, me muero de hambre o talvez me muero en el hocico
de algún sucio animal así que le pondré atención que más da, aquella hormiga
dijo que difícil es hablar con tu
mente, ¡enserio! Tanta bulla que hace y no dice nada bueno, la enfocas en cosas
que no vale la pena, Pero bueno, mi estimado humano, mi idea es, de que
pienses, si, que pienses; una hormiga sensata me dijo una vez y es lo que
quiero transmitirte, me dijo mi camino es largo y con muchos riesgos, riesgos
de ser aplastados, riesgo de perdernos buscando comida, pero hay que saber
que no estamos solos, que siempre va a ver algo o alguien no importa quien, si
es blanco o negro, si es grande o chico, si es inteligente o no, todos tienen
una historia, un algo que decirte, y por eso entre las hormigas llevamos
hojitas mordidas, y las dejamos en el camino no importando para quien, si será
hormiga o no, pero servirá para cuando pase alguien, y cuando ese alguien las
vea, sepa por donde pasar, así, así, sucesivamente, cada hormiga deja hojitas
mordidas, para que nadie se pierda, y cuando yo veo una de estas hojitas digo
alguien más ya paso por este camino, y si hay una hojita mordida entonces seguiré
el camino, y donde no hay hojita no caminare, es entonces donde los miedos no
tienen cabida, es allí donde uno se siente seguro y callamos la bulla de la
mente para escuchar a las ideas, nosotros no tenemos un Dios como los humanos,
el cual les provee todo lo que ellos quieren o desean dijo aquella hormiga, que
fácil suena la vida con ese Dios material, nosotros en cambio no esperamos que
nos den las cosas del cielo, la hormiga seguía hablando sin parar contándole al
humano muchas mas historias y de repente dijo, por eso humano, tu que puedes
hablar, pensar, date cuenta, date cuenta de las cosas que te pierden de ti de
tu camino, y busca en las personas esas hojitas mordidas para aprender en donde
caminar, y bájale volumen a esa bulla en tu mente para escuchar esa voz que se
escucha a lo lejos pero que es muy sensata.
PENSAMIENTO:
La mejor experiencia es
la que se vive, y la que se puede compartir, para con alguien más, hay que
dejar nuestra hojita mordida en la vida tambien.
-Paulo Roldan
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