jueves, 16 de mayo de 2013

Los porqués de ser niño otra vez

-->
                                                    Los porqués de ser niño otra vez:        

Me subí al metro el otro día he inmediatamente eche una mirada completa a todo allí dentro, mi instinto de analizar reacciona de inmediato y hace que me realice una pregunta muy simple pero con una respuesta muy rebuscada, que pasaría si todos acá en este metro fuésemos niños otra vez?

La respuesta me la iba dando cada rostro que veía en dicho transporte publico, la cara de un muchacho que parecía venir en su propio mundo escuchando música de moda a todo volumen, inclinando su cabeza para arriba y para abajo como afirmando todo lo que veía, yo lo veía de lejos y pensé, ¿es nuestra forma de ser la que hace que creemos diferencias entre una persona y otra?

Una anciana que venia a la par de él hacia unas caras como diciendo que raro, y se cambio de lugar.

En la mente esta la barrera que hace la diferencia pensé, una mente joven no va a entender a una mente vieja, a una mente no le gusta pensar en como eran las cosas antes y una mente vieja no le gusta ver como cambiaron las cosas hoy en día.

Entonces me los imagine como dos niños de 5 años y esto veía, el niño escuchando música y bailando al mismo tiempo con una sonrisa sin igual, haciendo muecas con sus manos esperando las palmas de los que lo veían, a la anciana como aquella niña preguntona acercándosele al niño y preguntándole ¿que escuchas? He imitando los pasos del niño, entonces ambos escucharían la música y bailarían rompiendo cualquier barrera que pudiera diferenciarlos.

Seguí riendo y observando, vi a una muchacha pintándose retocándose, arreglándose el cabello, escogiendo que lápiz labial debería utilizar de aspecto un tanto delicada, cerca de ella un joven de aspecto sencillo le recoge de inmediato el cepillo del cabello, que ella sin darse cuenta dejo caer, cuando ella ve aquel joven y ve el aspecto sencillo de este, recibe el cepillo dice un comprometedor ¡gracias! Limpia el cepillo y lo guarda, volteando su cara para el lado contrario del muchacho.

A caso como me veo es motivo de que me hablen? Me pregunte, en la mente creamos un aspecto ideal mínimo el cual si otra persona no lo cumple entonces no vale ni la pena verlo.

Vi a esa muchacha solo que ahora de unos 5 años, echándose brillo en la boca y balanceando sus pies de un lado a otro y diciéndole al niño de a la par ¡quieres! Con aquella sonrisa que caracteriza la inocencia infantil, el niño diciendo un ¡noo! Eso es para niñas pero juguemos “escondite” tomándose ambos de la mano y marchándose a jugar felices.

Que fue lo que perdí al crecer? Me dije, que fue lo que gane al crecer? Si lo que deje fue una inocencia la cual hace que veamos los colores mas vivos a las personas iguales, a mis amigos mi mejor pertenencia.

ahorrábamos para comprar una pelota y jugar con los amigos.

Entonces que gane? Gane, gane, el dejar que mi mente cree divisiones entre las personas, gane que mi mente piense que el tener dinero ahorrado o llevar mi billetera llena, me haga sentir que soy más o que soy menos que alguien, gane placer al comprar cosas y tener propiedades, olvidándome de la felicidad que sentía al compartir con alguien mas mis cosas, por eso hoy reflexiono sobre ese tema y lo comparto con el que quiera.


Pensamiento:

Las ataduras del alma las creo la mente, cuando se dio cuenta que necesitaba una explicación para creer en el alma.
                                                                                                                 Paulo Roldan




 

2 comentarios:

Patty Lopez dijo...

Quien no quisiera ser niño de nuevo, y es que es bien cierto que un niño es humilde diferente a un adulto.
De verdad que es bueno reflexionar en como era uno de niño y como es ahora uno de grande.... Conforme pasa la vida y el tiempo, nos volvemos prejuiciosos, cuando debe ser lo contrario.

Gracias por compartirlo, está muy bonito.

Anónimo dijo...

Que acertado lo que escribiste, la verdad es muy cierto quien no quisiera nuevamente regresar a ser niño, cero preocupaciones, estres, angustias, enojos... en fin el alma de un niño es tan inocente que todo lo cree, y no se preocupa por nada, que diferente fuéramos si todo lleváramos aún ese niño en nuestro corazón... pero esto lo vamos perdiendo conforme pasan los años y con los acontecimientos de la vida.. como siempre CONGRATULATION me encanto mucho :0)

Entre lineas va el mensaje!

¡Entre líneas va el mensaje! No recuerdo que se siente con exactitud, ya han pasado muchas lunas y tu recuerdo se desvanece, el tiempo borra...